viernes, 20 de julio de 2007

Génesis absurdo


En el principio yo aleteaba bajo tu manto. LA vida para mí era algo extraño y desconocido, en el principio no había anda más que tu vida haciendome sonreír, tu voz era la guía en medio de la oscuridad. Mi cuerpecito y el tuyo eran sólo uno... uno, mi vida era por ti, aún lo es.


La mañana y el día para mí eran oscuridad sin embargo, no temía estaba contigo. A veces te escuchaba llorar y no entendía no comprendía el porqué de tu tristeza, un velo negro que a ambos nos cubría... esa era la verdadera oscuridad.


Cuando mi madre me tenía en el vientre me hacía pleno, pero no puedo decir que siempre fue así, a veces no entendía por que nos tocaba una vida así. Ambos sentíamos lo mismo, llorabamos al mismo tiempo, nos sentíamos solos en medio del desierto del abandono y el desamor. EN medio de tus dudas creeme me snetía bien en ti.


Pero a veces aún me cuestiono por que tan solos, por que tan resignados. Pienso que a travez de la ventana se perdían tus ojos tal y como los mios se pierden a veces, tal y como nos perdemos a veces entre los caminos que se cruzan entre nuestra felicidad... entre lo que realmente somos.
Sentía como tu nostalgía tu sensación de debilidad se mezclaban y nos hacía sentir frágiles, pero jamás se olvidará el cariño que m has dado, mientras me acariciabas, mientras escuchabas música que me hacía nadar como un bello delfín rosado.
Mamá te amo... te ame antes de nacer... y te amaré...
Aquí no acaba nuestra historia

No hay comentarios: