sábado, 13 de agosto de 2011

Ángel de la guarda

Hoy quería decirte con la mayor honestidad que puede tener alguien disfrazado de humano como yo: me siento débil, sin fuerzas. Te agradezco el hecho de que hayas y hayan estado, porque sé que son varios. Te quería decir que no encuentro salida a estas pruebas que me ha puesto la vida, doy lo mejor de mí y sabes que soy un guerrero innato pero estoy frente a cosas que nunca había tenido que capotear. Tú más que nadie sabes que lo he intentado, que he sacado fuerzas de donde no las tengo para asumir esta serie de pruebas que me han arrugado el corazoncito... Pero estoy a punto de tocar fondo, a punto de quedarme sin ninguna fuerza y quedar tendido en mi cama tres días mirando al cielo, intentando entender por qué en este desierto, me tocaron situaciones que requieren de tanta grandeza.

Ver gente pobre en la calle me duele, y sé que lo sabes. Si levanto la mirada, si rehuyo, si no quiero ver es porque sencillamente me causa pánico tener que asumir que tantos seres humanos están viviendo en condiciones infrahumanas. Más que nadie conoce(s)(n) mi historia, entiendes que si volteo mi rostro sobre ellos surgirá mi amiga la depresión y llevo meses sin verla, sin siquiera saber de ella... Amiguito, una vez me enseñaron que si uno no era capaz de enfrentar tantas cosas debía dejarlas en manos de la fuente de la vida y eso haré... Este período de mi vida tan agitado, simplemente se lo entrego al origen de mi ser.

Lo positivo de este momento es que mis amigos y amigas han estado ahí. Desde el blog hasta la universidad esas personas preciosas que me sonríen me dan fuerza para arrinconar a mis miedos y decirles que todo saldrá bien; me gustaba mucho la magia en mi infancia porque con una varita mágica solucionabas todo, sin embargo, como diría un profesor de yoga: "una sonrisa le puede cambiar la vida a alguien, sonríe...", intentaré sonreír, por fingida que parezca, la haré de corazón... Porque ante el fuego de la vida, una sonrisa apaga el ansia de destrucción.

Te amo

Att: IC

2 comentarios:

JP dijo...

Si... a veces uno se cansa

Y cuando espera tocar fondo se da cuenta de que ya esta subiendo de nuevo.

Si... a veces desaparezco. Sigo pendiente de cada publicacion que haces, así no la comente. Me has hecho aguar los ojos en varias ocasiones...

Sin ser el esponjoso Quike Micifous, tambien soy un gato... suelo regresar ronroneando cuando escucho algún llanto.

Elena P.G. dijo...

¡Mucho ánimo, mucha fuerza para tí!!!. Y recuerda que seguimos aquí, queriéndote, esperándote.
Mil besos.