domingo, 12 de marzo de 2017

Desaparecer

Para cuando me vaya habrá una huella en las esquinas,
que no son otra cosa sino el final de un camino,
una desembocadura a otro destino.

El vibrar de la incertidumbre que acompañó el primer paso,
nos sigue sigiloso al vacío que saltamos.

Las cárceles multiformes,
que son rostros,
cadenas o condenas.

Y las libertades siempre fuera
de lo que llamamos nuestro,
nos aterran.

La necesidad del nómada,
que es la curiosidad de conocer
más allá de las montañas.

Presas somos en un mundo sin límites,
en cárceles sin barras
e infinitos vacíos.

Que la libertad no es otra cosa,
que confiar en la caída.

4 comentarios:

CrisC dijo...

Partir es con alguna frecuencia ir hacia uno mismo, así ningún vacío lo es tanto y tampoco lo es ningún destino.

Si nómadas y libertarios, no puede haber temor: sin riesgo no hay victoria; y si hay caída, hay cielo como norte.

Vicky dijo...

CrisC, partir es ir siempre hacia uno mismo. Y como dicen los poemas indígenas: "Salta, ya encontrarás piso".

mario dijo...

caer hacia el otro

Vicky dijo...

O hacia uno, Mario.