viernes, 29 de junio de 2012

La flor que no claudica en el desierto despierta a amaneceres vivos

El sol bendice el camino de las sombras lánguidas y cansadas de la arena

Cual escorpión que busca en veneno, cual botón que florece en verano.


La flor que no se rompe ante el vendabal tiene derecho a soñar

Sus espinas ya no pican, su aroma no adormece

Porque quien subsiste a la dificultad es acreedor de la conciencia


La semilla que sin sustento surge, es dueña de la vida

Conquista el horizonte, sus pétalos sobre soles rojos

Déjala soñar, déjala vivir

1 comentario:

Garsil dijo...

Buenas tardes... Dura la vida,
surgir contra las dificultades,
realidad y desapego,
todo es tendencialidad, tendensidad, tensividad.
Gracias